31 Mar Ejercicio y salud mental
Debido a la peculiar situación en la que nos encontramos desde finales del mes de enero, nuestras costumbres se han visto modificadas radicalmente. En un país como el nuestro en dónde convivimos con el estrés diario debido a horarios, responsabilidades, vida social …Una de las mayores preocupaciones radica en el hecho de poder mantenernos ocupados mientras dure este confinamiento. Elementos como el ejercicio físico, junto con la música o el arte, han tomado una vital relevancia. Quién nos iba a decir hace apenas dos meses, que correríamos km por el pasillo de nuestra casa o que moveríamos alfombras y mobiliario para poder entrenar a través de una videollamada con nuestro entrenador personal.
Los espacios han cambiado, las rutinas han cambiado y la necesidad de realizar algún tipo de actividad física ha quedado de manifiesto.
Éramos conscientes de los beneficios a nivel físico que nos aportaba, pero ¿sabíamos realmente hasta qué punto era importante para nuestra salud mental?
Diversos trabajos concluyen que la realización de ejercicio físico de manera regular lleva a una reducción del estrés y, por consiguiente, una mejora del estado de ánimo. El ejercicio ayuda a prevenir, gestionar y rehabilitar diferentes condiciones musculoesqueléticas, cardiorespiratorias, metabólicas y neurológicas, pero además diversos estudios muestran la utilidad de la actividad física como complemento a terapias en casos de ansiedad y depresión severa.
El vínculo ejercicio físico/salud mental, tiene su origen en un aumento de la circulación sanguínea causada por el propio ejercicio. Este aumento de flujo sanguíneo tiene un impacto positivo en zonas del cerebro que controlan reacciones físicas relacionadas con el estrés, motivación, estado de ánimo, integración de la memoria y un mejor desempeño de las funciones cognitivas o de la inteligencia. Como ejemplos: el ejercicio aeróbico (correr, nadar…) tiene un efecto protector del sueño; los ejercicios de estiramiento relajan y alivian tensiones acumuladas; el yoga puede ser de gran ayuda tras un shock postraumático…
En la adolescencia, el ejercicio está directamente relacionado con el autoconcepto a nivel físico y, por consiguiente, el bienestar psicológico; en otras palabras, la práctica de actividad física de forma continuada ayudará al desarrollo de competencias físicas e influirá directamente en el nivel y calidad de la autoestima.
En referencia a las personas de mayor edad, grupo especialmente castigado por esta pandemia, la merma de las habilidades físicas puede ser prevenida mediante la práctica de ejercicio supervisado y regular que contribuirá a la mejora y mantenimiento de su calidad de vida, lo cual incluye su bienestar psicológico.
Laura Redondo, experta en psicología y profesora del Grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte nos dice: “…pese a que se ve como un encierro, lo cierto es que el ser humano está diseñado para la supervivencia, y estemos en la circunstancia que estemos trataremos de conseguir un equilibrio. Por tanto, debemos tratar de percibir esta situación como una oportunidad para medirnos y para explorar nuestra resistencia y creatividad. Aquí sin duda un factor fundamental es la actividad física, pues pese a no poder salir al exterior sí podemos generar en casa hormonas como la oxitocina. A través de ella, sin duda, aumentará nuestra sensación de bienestar y reducirá sensaciones negativas como agobio o ansiedad. Por tanto, su función no solo es la meramente física para mantenernos en forma, cuestión que también es importante, sino para mantenernos psicológicamente estables, previniendo posibles efectos adversos de esta situación como crisis de pánico o aumentar nuestro bienestar y equilibrio psicológico. Desde luego debemos pensar que, sí o sí, saldremos fortalecidos de esta situación y valoraremos más lo que tenemos, donde ojalá aprendamos a cuidar y preservar nuestro estado de bienestar y nuestra libertad”.
Son muchos los beneficios a nivel psicológico que el ejercicio va a aportarnos y que pueden ser de vital importancia para superar esta situación tan inusual en la que estamos inmersos. Por otro lado, es actualidad que la gravedad en los casos de COVID-19 está exacerbada cuando existen patologías previas como enfermedad cardíaca, pulmonar o diabetes; enfermedades que habitualmente van asociadas a obesidad, vida sedentaria y falta de actividad física.
Sabemos lo difícil que puede resultar en esta situación organizarnos para dedicar parte del día a realizar ejercicio, debido al teletrabajo, la preocupación por la situación actual, la falta de espacio, etc.… pero es muy importante que se mantengan rutinas y especialmente las relacionadas con el deporte.
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Ahora más que nunca, BJ TEAM.
Susana Lorenzo y Bruno Castro, entrenadores personales en BJ Trainers & Co.